Según el favor del viento
- Jéssica Signoretta
- 10 nov 2017
- 1 Min. de lectura

Si pudiéramos editar las definiciones de la Real Academia Española, a la palabra sensibilidad le agregaríamos sin dudar <el disco La Flecha, de Mariana Päraway>.
Lejos está del lugar común de lágrima fácil, porque la sensibilidad tiene aristas infinitas, como la vida, como las personas. Ingrediente necesario para reconstruirnos y salir siempre hacia adelante, como una flecha, claro. Fijate todo lo que engloba este disco, entonces.
Siempre destacamos el folcklore intuitivo que Mariana plasmaba en sus canciones, en este caso todas en castellano, que sigue manteniendo intacto. Pero la vasta amalgama de climas que recorre ‘La Flecha’ contiene alto contenido poppero y hasta un efímero rap de la mano de Faauna en La belleza del error. Pero cuando un bolero se asoma con Carnada, junto a Violeta Castillo, relatando metafóricamente un femicidio, culmina en una oda a las raíces latinoamericanas más auténtica que nunca.
Diez canciones con una carga poética y armonías volátiles que traspasan cualquier pared y que remontan cualquier sensación. ‘La Flecha’ suena como las olas del mar, que nunca se quedan quietas, que van y vuelven, arrasando con todo lo que tienen a su alrededor, con el objetivo siempre firme y con la serenidad libre; con memoria colectiva construida con colaboraciones como Andrea Echeverri, Loli Molina y Shamann Herrera, el disco irradia una fuerza que atraviesa a quien lo escuche y es tan subjetivo el desenlace, que agregarle más palabras al mundo que se abre después de clickear play, detendría semejante flecha.
Comentarios